El agua es un recurso natural indispensable en nuestras vidas pero lamentablemente escaso. La recogemos de la naturaleza, en estado limpio, y la devolvemos nuevamente al medio después de utilizarla, aunque en un estado muy deteriorado y mezclada con grasas, detergentes y otros residuos.
Con la finalidad de mejorar la calidad del agua, proteger y restaurar el medio ambiente, tenemos el deber de limpiarla antes de devolverla de nuevo a la naturaleza para que continúe siendo útil, reutilizable y no se detenga el ciclo biológico natural.
Nuestra gama de depuradoras de aguas residuales contribuyen a la protección del medio ambiente y se caracterizan por su reducido tamaño, poco peso y alto rendimiento. Están diseñadas y fabricadas con la tecnología más avanzada por un proceso de rotomoldeo que consigue un producto final sin soldaduras, lo que garantiza una contención del líquido sin riesgo de filtraciones.
Por supuesto, todos nuestros equipos de depuración de agua residuales cumplen con las exigencias de la normativa vigente del Reglamento del Dominio Público Hidráulico del Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo, solucionando cualquier problema de tratamiento y depuración de aguas residuales cuando no existe la posibilidad de conectar directamente a la red de saneamiento municipal.
Al estar fabricados en polietileno de alta densidad, material inocuo, reciclable, muy resistente y ligero a la vez tanto la manipulación como la colocación de las depuradoras biológicas es muy fácil y no se precisa del uso de grúas, con el consiguiente ahorro económico.