La Fosa Séptica de tratamiento anaeróbico por digestión no genera ruidos.
En un único contenedor se realizan las dos fases de depuración (sedimentación y digestión). Las grasas se separan quedando en la parte superior y la materia orgánica se decanta quedando en la parte inferior donde empieza el proceso biológico de descomposición y digestión de la materia orgánica, gracias a los microorganismos (bacterias) anaeróbicos que se forman que encuentran un medio de cultivo y se encargan de digerir y descomponer la materia orgánica.
El resultado final es la salida, a través del tubo superior, de las aguas depuradas en un grado no muy elevado y sin sólidos, no pudiendo garantizar que el efluente tratado cumpla los valores límites permitidos por el R.D.P.H. (Reglamento Dominio Público Hidráulico).
No obstante, si a continuación de la Fosa Séptica, se realiza un tratamiento secundario con el separador de grasas o con un filtro percolador (ver imágen), se puede garantizar el cumplimiento de los valores límite establecidos en la tabla I del R.D.P.H. (Reglamento Dominio Público Hidráulico).
El efluente tratado se puede evacuar por drenaje.
Recomendamos pretratar siempre las aguas residuales grises con un separador de grasas y instalar como mínimo una arqueta de inspección tal y como se puede apreciar en la siguiente imágen.
Fosa Séptica
Tratamiento anaeróbico por digestión
Composición
Funcionamiento
El equipo de depuración se instala enterrado bajo tierra (ver instrucciones). Al ser una solución compacta que integra todo el proceso de depuración en un único recipiente, ocupa muy poco espacio y requiere muy poca obra civil. El polietileno, al ser un material muy resistente y ligero a la vez, facilita tanto la manipulación como la instalación, que no requiere el uso de grúas, con el consiguiente ahorro económico.
Recomendamos colocar siempre un sifón antes de cada contenedor.
El mantenimiento es muy simple y se realiza cómodamente a través de la tapa de inspección, situada en la parte superior. Una vez al año, o cuando sea necesario, aspirar el lodo depositado.
Importante: No vaciar totalmente. Dejar siempre 1/3 del contenido.